Correr en el parque

Ir a correr al parque, como actividad física no reglada, es disfrutar del aire libre, del frío, del viento, de la lluvia , del sol y del calor. Una practica sin horario ni coste regida por unos parámetros de regularidad. Una mejora notable a la condición física y mental del corredor. Durante la sesión de entrenamiento se segregan hormonas, endorfinas, que hacen fluir la dopamina en el cerebro generando una sensación placentera. La ausencia del entrenamiento corta el fluido de bienestar e incrementa el malestar fisico y psíquico. Genera ¨mono¨.

La carrera continua, salvo por una pequeña inversión en material, es gratis. Cuando se cruza el negocio, el premio, la recompensa económica y material, aparecen las empresas, aparecen la ¨Carreras Populares¨, los obsequios, las marcas y lesiones.

En China en 2014 se celebraron 51 eventos organizados llevando a mas 900 mil personas a esas pruebas. A unos diez euros de inscripción como media. Un nicho de mercado enlazado al incremento del poder adquisitivo de la clase media.

La gran diferencia entre los parques de Madrid y de Pekín, que es donde corro actualmente, es que en la capital china están asfaltados en su totalidad y se cobra entrada. Ese coste en el parque de Chaoyang en 5 RMB (0,8 euros) un día de 8 RMB el ticket mensual, el que yo tengo y 80 RMB el ticket anual. Un pequeño desembolso que devuelve a cambio, unas cuidadas instalaciones, aseos y personal de seguridad.

Chaoyang es un parque inmenso, el más grande Pekín, con 288 hectáreas, cuenta con parque de atracciones, varios lagos, canchas de tenis, voley playa, piscina de aire libre, campos de fútbol, mesas de ping-pong, zonas de recreo y gimnasio al aire libre. En el distrito donde se encuentra el parque viven 8 millones de personas.

Desde el inicio del 2015 hay una pista de atletismo que recorre el parque, algo mas de doce de kilómetros, a salvo del tráfico rodado donde poder entrenar libre y alegremente.

 

Deja una respuesta